miércoles, 20 de marzo de 2013

Mujer de alambre



Para A.

Me muestro como soy,
con esa desnudez que oculto a los espejos,
con la piel asustada
y un pañuelo de sal secándome los ojos.

Nadie me vio así, tan indefensa,
tan despojada,
tan próxima al vacío.
Nadie supo violar mis cicatrices
ni alejarme del tiempo que me borra.

En ningún otro abrazo hallé la vida.

He vuelto a ser de alambre,
una mujer que aprende la luna cada noche.
Un presente sin máscaras
que se redime en ti,
como esa flor que espera bajo el hielo.

miércoles, 6 de marzo de 2013

A veces

A veces es mejor que nada ocurra,
que los días sucedan sin memoria,
que cada noche suene el ladrido de un perro,
la oscuridad,
ningún sonido amable,
sólo el miedo del mundo estallando en mi vientre.

A veces es mejor vivir de espaldas
sin que nadie tropiece en mi cansancio,
sin que nadie me manche la piel de libertad.

Vivir sin sangre
como viven los peces y los muertos,
al ritmo de la nada,
oscura pero a salvo,
como esta voz infértil en la que escondo un grito.